La resurrección de Sony, contada por su presidente en Forbes

Una primera idea fue materializada con rapidez. Sony quería que los «jugones» usaran más la PS3 como reproductor, así que si se encontraban con una película gratis dentro de la caja cuando compraban la consola, no tendrían más remedio que probarla. Howard llamó a la división de Sony Pictures y le dijo «Necesito que me prepares medio millón de unidades de Spider-Man para Playstation 3«.

Este fue uno de los primeros movimientos para el cambio desde 2004. «La división de cine no se comunicaba con la división de música, ni con la de electrónica». Los departamentos podían perder un mes entero para ponerse de acuerdo en, por ejemplo, cuánto recibiría el estudio de cine por usar televisores o móviles Sony en los escenarios de rodaje. Eso fue lo que se solucionó.

Para los estudios y los grandes almacenes, el gran argumento de Sony a favor del Blu-Ray es que aunque estaba casi a la par con el HD DVD en venta de reproductores, el formato azul tenía una ventaja real de 1.8 millones si contaban las Playstation 3. Así que Sony se puso manos a la obra para convencer de que su criatura no era otro Betamax. Uno de los primeros movimientos agresivos de Sony fue convencer a Lionsgate para que no aceptara pagos de Toshiba por pasarse al HD DVD.

Cuando Toshiba comenzó a recortar sus precios, Sony necesitaba vender más reproductores. Su división de juegos pensó entonces en recortar en 100 dólares el precio de Playstation 3, e incluso vender una versión todavía más barata pero con menos disco duro. Sony además se ofreció a pagar a Best Buy los anuncios de las ofertas en los periódicos dominicales, patrocinando carteles promocionales en sus tiendas y ofreciendo packs con descuentos muy interesantes. Por ejemplo, un LCD Bravia con un reproductor Blu-Ray de regalo y 5 películas. Lo mismo se ofreció a cadenas parecidas como Wal-Mart, Target o Circuit City, entre otras.

A pesar de los rumores que apuntan a todo lo contrario, los ejecutivos de Sony desmienten haber pagado a los estudios de Hollywood para que se alinearan con el Blu-Ray en la guerra de formatos. Pero Sony se gastó más de 60 millones de dólares en promocionar la Playstation 3, desde noviembre a enero en Estados Unidos, llamando la atención vendedores y distribuidoras.

El voto por el cambio fue la decisión del gigante del entretenimiento Warner Bros. Después de escrutar las ventas de reproductores en Navidad, Warner anunció el 4 de enero que adoptaría en exclusiva el Blu-Ray, declinando su apoyo al HD DVD. El 15 de febrero Wal-Mart tomaba la decisión de vender tan sólo reproductores BD. Cuatro días después Toshiba anunciaba que abandonaba el negocio del HD DVD. Como consecuencia, en los primeros seis meses de 2008 el número de reproductores Blu-Ray se dobló a 6 millones. La lucha de Stringer por la unidad daba sus frutos. El fantasma del Betamax podía descansar en paz.