Según un artículo que publicaba ayer el Hollywood Reporter, el mercado videográfico en el Reino Unido está experimentando un aumento inusual de sus cifras, sobretodo si tenemos en cuenta el período de crisis mundial que estamos viviendo.
El artículo en cuestión se basa en un estudio de la Asociación Videográfica Inglesa (British Video Assn.), y en él se señala que las ventas de DVDs han experimentado un incremento del 6.5% respeto al mismo período del año anterior.
Curiosamente, el gremio de salas de cine británicas también ha experimentado su mejor condición en los últimos 40 años, con un total de 53.6 millones de entradas vendidas durante la época estival, lo que representa una mejora del 6% respecto al ejercicio anterior.
Y las ventas de discos Blu-ray todavía son más exageradas, con una diferencia del 396% a favor (lo que indica también que el año pasado apenas se vendían BDs).
La conclusión, aunque no existe un único factor determinante, puede ser que en época de recesión, la gente tiende a quedarse más en casa. Comprar o alquilar una película para disfrutar junto a la familia viene a ser la forma más económica de ocio hoy en día, frente a cenar en un restaurante, que puede implicar un coste de 8 a 20 veces mayor.
No sabemos si este fenómeno se repetirá en España, donde cada vez hay menos videoclubes y cada vez se «piratean» más películas…